Mucha publicidad de la que veo últimamente (no se porque será) no deja de ser un listado de técnicas, formaciones, patologías susceptibles de tratamiento e, incluso a veces, conceptos yatrogénicos.
Cuando veo:
Fisioterapia Pepito Tocaespaldas:
-Osteopatía.
-Terapia miofascial.
-Mulligan.
-McKenzie.
-Electrolisis Percutánea Intratisular.
-Vendaje Neuromuscular.
-Método Pold.
-Fibrólisis Diacutánea
-Punción Seca.
-Acupuntura.
-Masajes.
-Disfunciones X
-Alteraciones XX
Me pregunto ¿El paciente entiende algo? ¿Le aclara si debe venir a nosotros o no? ¿Estamos ayudando con esto a la imagen y concepto de la Fisioterapia?
Luego nos quejaremos sorprenderemos de que el paciente diga: «vengo a que me dé un masaje» «Me duele la espalda, quiero que me haga EPI, que le fue muy bien a mi primo para la rodilla» «Quiero acupuntura para adelgazar»… Pero, si le hemos puesto una lista en el folleto/escaparate ¿no sería lógico que elija, cómo tu eliges cuando vas a un restaurante?. Pues eso.
Creo que con esto no empezamos con buen pie para hacer una anamnesis, evaluación, exploración y en base a esto elegir del arsenal terapéutico que disponga según mi formación lo que voy a realizar, tras explicarle al paciente porque, que esperamos tras esa aplicación, posible efectos adversos y preguntarle si está de acuerdo y continuamos y tras ello reevaluar… Un momento, un momento porque… parto de que todos actuamos así ¿no?.
Si todos actuamos así y lo importante es saber qué, cómo, cuándo y porqué hacer (o no hacer) algo antes de hacerlo ¿Por qué tal listado entonces en tantos escaparates y folletos? ¿No bastaría con un simple Fisioterapia o Pepa Neurofriki Fisioterapeuta?. O es que, quizás, aún sigamos con algún problemilla de indentidad
Nos vemos,
Nacho Fabiani 
12 noviembre 2014 en 02:32
Hola,
No estoy totalmente de acuerdo con lo que expones ahí arriba.
El que tu pongas la lista de patologías que tratas hace a que a la gente que puedes ayudar con tu trabajo, sepa que esas patologías pueden ser tratadas por un fisio y que puede ir a tu consulta a pedir tu valoración, con lo cual es bueno para tu negocio. Muchos pacientes desconocen la multitud de patologías y dolencias en las que podemos ayudar.
En el caso de la lista de técnicas tampoco veo que tenga que ser algo malo. Seguro que muchos pacientes no saben de que les hablan al leerlas pero otros puede que en función de tratamientos anteriores busquen lo que mejor les haya funcionado. También hay casos (todavía pocos) en los que otros compañeros fisios o médicos, derivan a otros compañeros recomendandoles ciertos tratamientos. Si cuando llegan a la consulta tu le haces como dices su anamnesis, exploración, valoración…y sigues decidiendo con el paciente el tratamiento, seguirás trabajando bien.
Yo pienso que toda información bien enfocada puede ser buena.
Gracias por hacernos debatir y enhorabuena por el blog!
14 noviembre 2014 en 20:44
No hay porque estar de acuerdo XD es una reflexión propia que a lo mejor sirve para hacer pensar.
El problema q veo es el que describo, que luego prime más la técnica que el razonamiento, tanto desde nuestra actuación, como desde la «exigencia» del paciente.
Nos vemos,
14 noviembre 2014 en 19:44
El problema con esto Nacho es el «posicionamiento» en internet. Si tu blog o web tiene palabras como Osteopatia, Mckenzie, masaje, mulligan, miofascial. Etc, etc. La gente que busque en internet «fisioterapeuta Sevilla» encontrara a cientos, pero si busca «mulligan Sevilla» te encontrara a ti… Cada vez la gente lee más y tiene acceso a más información. Hace poco un paciente vino pidiéndome McKenzie, y eso que yo no lo publicito por internet en ningún sitio…pero esa persona llevaba muchos años con lumbalgia y de buscar y buscar en internet conoció el método y al buscar en internet dio con mi blog.
Un ejemplo perfecto es mi blog. Antes tenía una sección de «tratamiento» donde ponía todas las técnicas y métodos que empleo en la clínica. Luego vi, que como bien dices, el paciente no se enteraría, así que puse enlaces en cada técnicamente de manera que el usuario que quisiera obtener más información podría acceder rápidamente…pero no sirvió de nada así que finalmente quite ese enlace y hoy en día lo que hago es que pongo esas palabras clave en los TAGS o étiquetas de las entradas y así la gente encuentra el blog. Por ejemplo al final de las entradas verás que pone: David Carrascosa Fernández, fisioterapeuta, Osteopata, Linares, Jaén, etc.
Mi idea es posicionar el blog, pero como bien dices da una imagen distorsionada de la fisioterapia…pero es que hay que hacerse a la idea de que en una carrera que empieza a poner los pies sobre suelo sólido evidenciado es normal que no haya una identidad…y no creo que lo vayamos a ver…tiempo al tiempo…los fisios vamos aprendiendo…nada tenemos que ver con los fisios de hace 20 años… Peor no olvidemos, ni infravaloremos a los pacientes…ellos exigen mucho más que hace 20 años…ya saben que el fisio es una gran elección frente al dolor, la disfunción y la discapacidad…y cada vez exigen más especialización y efectividad…y más ahora en tiempo de crisis.
Gran reflexión!!
Mi aportación es Menos apellidos y más nombré común!!
14 noviembre 2014 en 20:42
Muy buena David,
Supongo que pones lo de los TAGS como ejemplo. Y ahí digamos que no lo veo mal, al contrario, ya que apenas queda consatancia, pero en las búsquedas si cuenta aunque no de forma directa (no se si me explico) El problema (partiendo de que es una refelxión y no pretendo sentar verdad, sino hacer reflexionar) lo veo cuando lo usamos como publicidad directa, y además en forma de listado o con vaga explicación… dificultando la comprensión de lo que hacemos, marcando más las técnicas que el razonamiento.
Un abrazo!!
10 diciembre 2014 en 19:01
(esta respuesta no la he escrito para tí, sino para otro blog que venía a decir lo mismo haciendo referencia por cierto a este artículo tuyo; como no soy capaz de encontrarlo… ahí te lo encasqueto 😉 ) SALUD
***
Estoy de acuerdo con la cuestión de fondo, cómo no. Somos profesionales, debemos hacernos valer y el término “fisioterapeuta” define muy bien lo que hacemos, tratar cosas –las que sean- con terapia física.
Ahora bien (siempre hay un “ahora bien”): también es verdad que, siendo una profesión joven como somos (al menos en nuestra forma y reglamentación actual) el público no conoce muchas de las cosas que hacemos. De hecho, dudo seriamente de que tuviera tantos pacientes de ATM como tengo actualmente, si no fuera por los trípticos informativos que tengo en la sala de espera sobre ciertas ramas de la fisioterapia, o patologías específicas, que me interesa que la gente sepa que puede tratarse en mi consulta. Lo mismo podría decir de temas digestivos, o reflexoterapia, o cuerdas vocales, o cefaleas, o pediatría…
Resumiendo: que molaría que, tal como sucede al decir “medicina”, con solo decir “fisioterapia” la gente automáticamente se imaginara el amplísimo abanico de técnicas que abarcamos. Lamentablemente… eso no sucede hoy en día. Y es normal, porque tengamos en cuenta que hasta ayer por la mañana –como quien dice- casi todos los fisios trabajaban en gimnasios de traumatología masificados.
Pero en fin: que sí, que las cosas se pueden publicitar con más elegancia, sin vocear la mercancía como si fuéramos curanderos de feria.
11 diciembre 2014 en 21:23
Creo que te refieres a esta de Luis Torija http://zienziayharte.blogspot.com.es/2014/12/del-dicho-al-hecho-reflexiones-sobre-la.html
Estoy en parte de acuerdo contigo, al igual que tu conmigo jajaja. Pero una pregunta/reflexión ¿Saben los pacientes los listados de técnicas, por ejemplo quirúrgicas, que utlizan los médicos? No hace falta. Eso quiero para la Fisioterapia.
Nos vemos,
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