Nacho Fabiani

Dia a dia, explicaciones, pensamientos, vivencias, dudas… de un hombre que tuvo la suerte de hacerse fisioterapeuta

Fisioterapia y Salud en la Semana Santa

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Semana Santa. Vacaciones. Fiesta. Culto. Hermandades. Cofradías. Pasos. Nazarenos. Crucificados. Pasión. Cirios. Hachones. Sandalias. Costaleros. Penitencia. Dolor. Muerte.

Niña Observando el paso de una Procesión

Semana Santa. Lumbalgias. Callos. Contracturas. Ampollas. Sudor. Hernias. Cansancio. Dolor. Agotamiento. Cervicalgias.

Hoy hablaremos de diversos personajes protagonistas de la semana santa:

Costalero:

De todos es conocido ya, que últimamente, al menos en Andalucía, el colegio de Fisioterapeutas pone en funcionamiento diversos «Salones del Costalero» para que estos acudan gratuitamente a cuidarse y prepararse (un poco tarde en la mayoría de los casos) antes o después de su gran momento.

Antiguamente los costaleros eran trabajadores del puerto, marineros fornidos acostumbrados a cargar grandes pesos, durante gran parte del día y casi todos los días de su vida. Hoy día los costaleros (por regla general y sin querer causar polémica) pasan la mayor parte de sus días trabajando en una silla y no realizan grandes esfuerzos salvo en ocasiones muy contadas.

Y estas personas se meten con 36 hombres más debajo de un paso con cerca de 40º según el calor que haya en el ambiente, pasan de 5 a 12 horas de pie, cargando unos 35kg, durante al menos una hora, y como poco un par de veces a la semana (conozco de casos que sacan 5 ó 6).

Así para terminar con estos y no repetir algo muy machacado, decir que estos deberían empezar su preparación al menos unos 3 meses antes de los Ensayos (ya que ahí ya empiezan a cargar estas cantidades) prestando especial atención a la musculatura abdominal (que en muchos casos tenemos descuidadas), Cuádriceps, hombros y cuello. Desde aquí recomendaría a los costaleros que esto lo trabajaran  también de forma funcional y podríamos equiparar su esfuerzo con la sentadilla libre realizada con peso en barra (y sus distintas variantes, según el esfuerzo que se va a realizar). Esta debería estar guiada siempre por un preparador físico para que enseñe la forma correcta de realización y así prevenir lesiones durante la preparación, ensayos y, por supuesto, estación de Penitencia.

Os dejo un articulo que refleja la preparación llevada a cabo por los costaleros.

http://www.universia.es/portada/actualidad/noticia_actualidad.jsp?noticia=99470

Nazareno:

En la mayoría de los casos nos olvidamos de ellos, ya que no realizan un esfuerzo tan evidente como el de los costaleros, pero ¿alguien se ha parado a pensar el esfuerzo que supone estar de 5 a 12 horas de pie cargando un cirio siempre por el mismo lado y apoyado en el mismo lugar? además de soportar calor (que según el color de la túnica será más o menos evidente), dolor en los pies (a lo que le uniremos las ampollas si las sandalias son nuevas o sólo se las pusieron el año pasado) y ese capirote, que además de calor, a veces nos regala dolor de cabeza.

Además, el rango de edad en estos es mucho más amplio que en los costaleros, por lo que según la edad del mismo, todo esto se multiplicará.

Pues si señores nazarenos ustedes también necesitarían fortalecer su cuerpo,¿a alguno de vosotros se le ha ocurrido correr una maratón sin entrenar? deberían trabajar abdominales y piernas especialmente. para poder estabilizar el peso continuo del cirio y aguantar de la mejor manera posible esas horas de pie.

Penitentes:

Nazarenos sin capirote, en muchos casos descalzos y cargando una cruz. Para estos casi lo mismo que para los anteriores, pero estos además sufrirán un pequeño resquemor en la zona del hombro donde lleven apoyada la cruz (aunque en muchos casos se les permite cambiarla de hombro) que se acentúa cuando la gente pasa entre ellos apartándolas cual si fuera una puerta.

Personas, especialmente mujeres, que estrenan zapatos

¿Y estos? ¿no hacen estos penitencia? esas chicas monas estrenando taconazos, estrenando dolor de pies, ampollas y demás menesteres y que en muchos casos también están de 5 a 12 horas de pie y «peleándose» entre a bulla, para coger buen sitio y correr a ver la siguiente «corre, corre, que no llegamos…»

Dolor de pies

Alguno se me olvidará seguro, pero creo que estos son muy destacables y  decir que  generalmente los mueve, la pasión, sentimientos, tradición, cultura… Grandes aspectos con los que es difícil luchar, pero esto no está reñido con una buena preparación que, además, para más de uno será mayor penitencia prepararse concienzudamente y estar al menos tres meses haciendo ejercicio, que salir unas horas a hacer estación de penitencia (a la cual está acostumbrados año tras año).

También me gustaría deciros que ante esto (como ante cualquier forma de expresión, sea religiosa o no) es fundamental guardar respeto, si no la compartes o la vas a criticar, no lo hagas interrumpiendo, gritando, jugando, hablando, dejando sonar tu móvil (hazlo más tarde con tus amigos tomando un café). Son momentos muy importantes para algunas personas y no somos nadie para cuestionarlo. Y que la mejor forma de intentar vivirlo, y sentirlo, para poder cuestionarlo, es guardar silencio (no sólo ante la figura, yo también lo guardaría por cada uno de los que forman parte del cortejo ya que no es un fiesta o verbena es un momento de reflexión para muchas personas).

Hablaría de muchas cosas más pero no me gustaría entrar en vanas polémicas sobre mil aspectos de los que siempre se hablan.

Nos vemos,

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